Descripción
Roscón de Reyes con Nata de 1/4 de kilo, elaborado de manera tradicional en nuestros obradores todos los días
Elaborado con masa madre, dos días de fermentación lenta y utilizando las mejores harinas, mantequillas, leche, huevo, agua de azahar y ralladuras de fruta.
Formamos a mano cada uno de nuestros roscones, dándoles el máximo cariño, controlando los procesos de fermentación y levado de masas.
Una vez en los hornos de solera tradicionales nuestros roscones cogen su inigualable sabor y texturas, con un color dorado y un sabor excepcional.
¿La historia del Roscón? Una tradición milenaria
El origen del roscón parece estar relacionado con las fiestas saturnales romanas, aunque en la actualidad algunos lo relacionan con una representación complementaria y comestible de la corona de adviento, aun cuando la tradición de la corona de adviento es muy posterior en España, lo que hace muy dudosa esa relación. Estas eran fiestas dedicadas al dios Saturno con el objeto de que el pueblo romano en general pudiera celebrar los días más largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. Para estos festejos, se elaboraban unas tortas redondas con frutas como higos, dátiles y miel, que se repartían por igual entre los plebeyos y esclavos. Ya en el siglo III, en el interior del dulce se introducía un haba seca, y el afortunado al que le tocaba era nombrado Rey de Reyes durante un corto periodo de tiempo establecido de antemano. Desde los romanos existían juegos del haba en la península ibérica.
El roscón de Reyes original (o clásico) no suele llevar ningún acompañamiento o ingrediente añadido pero desde el último tercio del siglo XX se preparan variedades, como el Roscón de Reyes con Nata, con crema, chocolate o cabello de ángel en su interior, y suele contener uno o más regalos o «sorpresas» según el tamaño del roscón, u obsequios y un haba.
En España el Roscón de Reyes con Nata suele contener un haba. Pero hay lugares de España en los que hasta se ha llegado a insertar dentro del roscón dinero en efectivo, haciendo que la sorpresa de la persona que lo recibe sea aún mayor. En cambio en otros lugares la tradición es que cuando encuentras el haba has de pagar el roscón o si no pagar el próximo, mientras que se inserta una figurilla que es la que da el derecho a ser el coronado.